Joaquín Zuleta, académico del Instituto de Literatura, es parte del equipo multidisciplinario que estudia la tragedia del Estrecho de Magallanes, a través de un proyecto Fondecyt. Se trata del primer intento español por fundar una ciudad en el Estrecho, cuyo fracaso retrasó en más de dos siglos la colonización de la zona, hasta el establecimiento del Fuerte Bulnes en 1843.
De hecho, ya ha publicado un nuevo libro y un artículo con documentos inéditos.

El próximo verano, el filólogo Joaquín Zuleta Carrandi viajará 3.000 kilómetros para llegar al punto exacto donde, en 1584, se fundó la primera ciudad del Estrecho de Magallanes, a realizar excavaciones junto con un equipo de arqueólogos y un paleobotánico. La travesía será parte del proyecto Fondecyt “Ahondando en la epopeya del fracaso: una aproximación multidisciplinaria a la ciudad Rey Don Felipe (Puerto del Hambre), Magallanes, siglo XVI”, que lidera Soledad González Díaz, académica de la Universidad Bernardo O’Higgins.

Joaquín Zuleta

Llevan poco más de un año de ejecución. “Estamos avanzando; la magia de la interdisciplina, efectivamente ha sucedido. Hemos tenido discusiones notables”, afirma Joaquín Zuleta. Además de generar conocimiento, con nuevas publicaciones, la interacción ha inspirado reflexiones disciplinares. “En literatura, la comprobación siempre pasa por una cita textual. Para los arqueólogos, en cambio, tiene que haber siempre evidencia material y eso es muy interesante”, indica. “Hemos estado en terreno haciendo varias prospecciones; pasamos un detector de metales e hicimos unos planos desde el aire con un dron. Todo eso nos ha ayudado a ir entendiendo esta ciudad y el proyecto de Pedro Sarmiento de Gamboa. ¿Por qué se planificó así? ¿Por qué en este lugar?”, señala.

Del Estrecho de Magallanes al Canal de Panamá

El académico ha estudiado largamente la figura del explorador y navegante español y desarrolló dos ediciones críticas de sus testimonios, a través de extensas investigaciones en el Archivo de Indias y en el de Simancas. La primera edición crítica fue su tesis doctoral en la Universidad de Navarra, donde entró en contacto con el Grupo de Estudios de Siglo de Oro, Griso: “Sumaria relación” de Pedro Sarmiento de Gamboa, de 2015. La segunda, de 2021, incluyó misivas inéditas: “Cartas y relaciones del Estrecho de Magallanes (1580-1590)” de Pedro Sarmiento de Gamboa.

El equipo del proyecto está conformado por Antonio Maldonado (Centro Ceaza); Simón Urbina y Leonor Adán (U. Austral), Soledad González (UBO), Alfredo Prieto (Fundación Prisma Austral/ UBO) y Joaquín Zuleta (UANDES).

Ahora, en el marco del actual proyecto, se han sumado dos nuevas publicaciones del profesor Zuleta: la colección de capítulos “Quinto Centenario de la Circunnavegación (1522-2022)”, editada junto con Martina Vinatea, y un artículo en coautoría con Christophe Pollet y Alfredo Prieto, incluido en mayo en la revista Colonial Latin American Review: “Presentación de cartas, instrucciones y decretos de Su Majestad, y fortificaciones hechas por el ingeniero Bautista Antoneli (1608)”. Este último es un manuscrito del arquitecto de la expedición, que descubrieron en Nueva Zelanda. “Es un documento fantástico y completamente desconocido. Ahí viene un mapa inédito del Estrecho de Magallanes y también el primer diseño del Canal de Panamá, tres siglos antes de su ejecución”, anuncia el filólogo.

Revela, sin embargo, que Antonelli jamás estuvo en Chile: “Él desertó en Río de Janeiro. Escribe cartas al Consejo de Indias donde dice ‘No voy a ir porque ya vendieron todo, no podremos construir nada’. Cuando lo recogen a la vuelta, se informa sobre qué había pasado y hace un mapa extraordinario que aporta mucha información, sobre todo de la boca occidental del Estrecho de Magallanes. Y más de 20 años después, en 1608, escribe un libro con su experiencia y sus méritos, y cuela lo del Estrecho y el mapa”.

El mapa de Bautista Antonelli es el más completo que existe del Estrecho y fue encontrado recientemente en la Biblioteca Nacional de Nueva Zelanda.

Antonelli asegura en el manuscrito que el Estrecho de Magallanes no sirve para cruzar y que se debe abrir el canal en Panamá: “La Corona tenía esta discusión desde la década de 1550, pero Antonelli va más allá, porque explora el territorio, indica dónde debe hacerse la ‘cortadura’ y es el mismo corte que se hizo tres siglos después. Este imperio tenía algunos funcionarios extraordinariamente competentes, capaces de hacer un informe de altísimo nivel, y esa es una de las cosas que hemos descubierto en este proyecto”.

Epopeya de un fracaso

Tanto la deserción como la denuncia de corrupción que hace Antonelli, son constantes en la expedición que buscaba ser “una gran demostración de poder en el Atlántico y el sueño imperial de poner un cerrojo al Estrecho de Magallanes y, por lo tanto, cerrar la mitad del mundo”. Se trataba del primer intento español por fundar una ciudad en el Estrecho, cuyo fracaso retrasó en más de dos siglos la colonización de la zona, hasta el establecimiento del Fuerte Bulnes en 1843.

Inicialmente, viajarían tres mil personas -entre marineros, soldados y pobladores-, pero solo llegan unas 300. Y de las 23 naves que zarparon, solo sobreviven nueve. En el camino, abundan los naufragios y las deserciones. Pero las razones del fracaso no son técnicas, sino humanas.

“Sarmiento de Gamboa es el gobernador de las ciudades que se van a fundar en el Estrecho de Magallanes, y Diego Flores de Valdés está a cargo de la flota que debe conducirlo hasta allí y construir los fuertes. Pero hay una enorme corrupción de Flores de Valdés y de toda la oficialidad, porque venden en Brasil todo lo que tienen, las herramientas, el hierro… Todo. Y frente a esto Sarmiento de Gamboa está atado de manos pues no tiene potestad hasta llegar al Estrecho”, asegura el investigador.

“Los pobladores llegaron muy mal de provisiones y de herramientas. Intentaron conseguir alimentos, fundaron las ciudades, hicieron una iglesia, pero se debilitaron con los inviernos fríos y la enfermedad”. Tres años después, el marino inglés Thomas Cavendish se encuentra con las ruinas y rebautiza la ciudad como Puerto del Hambre. “Es un fracaso estrepitoso, seguramente la expedición más trágica de la historia naval de España. Se quiso correr un tupido velo sobre esta expedición que fue demasiado trágica y también una suerte de vergüenza y de deshonra”, concluye Joaquín Zuleta.