El mundo cambia… de eso no hay duda. Y la adopción tecnológica impulsada por la pandemia seguirá transformando las tareas, los trabajos y las capacidades en el futuro cercano. El aprendizaje continuo se convierte, entonces, en una habilidad esencial para adaptarse a los cambios y vivir en armonía en un ambiente complejo e incierto.
De acuerdo con el reporte bianual Future of Jobs 2020 del Foro Económico Mundial, el aprendizaje activo está en el top 3 de las habilidades más demandadas para 2025, por lo que todos estaremos llamados a reinventarnos varias veces en nuestra vida laboral, abriendo nuevos ciclos de aprendizaje y trabajo, con la meta de mantenernos vigentes.
Por eso la Universidad mantiene sus puertas siempre abiertas para seguir aprendiendo continuamente, de las más variadas formas, como lo demuestra el crecimiento de 400% en la matrícula de educación continua, impulsada por UAonline y que ha permitido, además, tener más de 38% de estudiantes de regiones.
Diplomas, cursos y seminarios -presenciales, híbridos y online- forman parte de esta nueva educación, uno de los pilares de nuestra Planificación Estratégica Institucional 2022-2026, y que se evidencia, entre otros, en el programa ESE 100 de nuestra escuela de negocios.
Claro que seguir estudiando y aprendiendo no solo nos ayuda a crecer profesionalmente, sino también a obtener nuevas habilidades y a mantener nuestra mente sana y activa a lo largo de nuestro ciclo vital, en uno de los países más longevos del mundo, como es Chile.